MÉTODO 2 - COCA COLA!
El proceso es bastante similar al del vinagre, pero más rápido, ya que no necesita mucho tiempo de remojo. En esta ocasión, las plumillas se oxidaron mucho:
Basta con remojarlas en un poco de coca-cola, no es necesario que se queden mucho rato, solo unos minutos:
Después, tallamos suavemente con un cepillo de dientes que ya no usemos. Al igual que el vinagre, al remojarse con la coca-cola, la parte en acero se oscurece. El latón, sin embargo queda intacto.
Lo bueno de usar coca-cola es que se le puede frotar un poco y sacar brillo otra vez a la plumilla (lo que no sucede con el vinagre):
La mayoría de las plumillas quedan utilizables de nuevo, pero en algunos casos, si la corrosión fue demasiada, se carcome y desaparece parte del metal. Si esto pasa en la punta quedaría separada, algo así como esto (fíjense en la punta):
Las gran mayoría de las plumillas, se salvó. He notado que hasta ahora usar coca-cola ha sido mucho más rápido que usar vinagre, quita el óxido al instante.
Al final, el metal también queda oscuro. Aquí veremos: cómo quitarles lo oscuro.
Un truco, pasar por toda la superficie de la plumilla (nueva u oxidada) la punta de un lápiz grafito. Esto sacará los restos de óxido y tinta que tenga adheridos y además dejará una capa protectora que también ayudará en el flujo de la tinta por la plumilla.
ResponderEliminarBuena idea AtariStart! haré la prueba con un par de plumillas que tengo por aquí.
EliminarYo lo intenté, el resultado fue positivo!
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